Zonas más afectadas: Tequendama, La Mesa, San Antonio del Tequendama, Anapoima, El Colegio.
Almeidas: Chocontá, Villapinzón, Guatavita.
Alto Magdalena: Girardot, Ricaurte.
Sumapaz: Fusagasugá, Silvania.
Gualivá: San Francisco, La Vega, Villeta, Sasaima.
Bogotá D.C.: La Calera.
El estudio también señala que la falta de actualización de los Planes de Ordenamiento Territorial (POT), las dificultades de control urbano y la construcción de nuevas vías han acelerado el fenómeno, generando desequilibrios en el desarrollo territorial.
Riesgos identificados: Pérdida de suelos de vocación agrícola, fragmentación de ecosistemas estratégicos (páramos, reservas, humedales), presión sobre fuentes hídricas y servicios ecosistémico, crecimiento disperso e insostenible de viviendas.
Medidas urgentes propuestas por la CAR:
1. Fortalecer los POT con límites claros al uso del suelo suburbano.
2. Proteger ecosistemas y suelos agrícolas de la ocupación indebida.
3. Controlar la urbanización en corredores viales.
4. Fomentar un desarrollo equilibrado que combine progreso económico con sostenibilidad.